sábado, 5 de mayo de 2012

En puro celo 1

Pues he decidido tomar una medida y ha sido retirar la tolva, juraría por lo que sea de que nunca se me hubiera ocurrido de que fueran tan listas e hicieran todo lo imposible por entrar a la tolva. 

Y registre toda la voladera asegurándome de que no haya nada que pueda parecer a un “agujero”, porque con lo listas que son… (He llegado a tener una periquita que ha anidado en el suelo, así que imaginaros) 



Al volver de nuevo, he visto todo lo que ha ocurrido y eso me decía claramente que las hembras no van a parar de hacer todo lo imposible hasta anidar, ¿sabéis que ha pasado en esta vez? 

Me he encontrado con unas cuantas manchadas de sangre y no sé ni que ha pasado, pero lo curioso es que solo estaban manchadas las hembras más veteranas y 3 jovencitas primerizas. Me harte y me tocaron los c*****s y directamente las he separado, ya que ni juntas pueden estar. Me quede todo tranquilo y a la próxima visita, un agujero habían hecho a la voladera y cuatro se escaparon. ¡SORPRESA! ¡QUE BIEN! Hasta un agujero han hecho en el cemento y han movido un buen cacho de tela metálica. (La tela metálica tenia un recubrimiento de 5-7 centímetros de cemento.)

Así que me harte de sus insistencias y me fui quitando algunos y así fue. Y ahora estoy muchísimo mas tranquilo con los que tengo.